Tienes la idea. Has puesto en marcha tu plan de negocio y estás listo para convertirte en todo un empresario novel. Pero, hay un problema. Cómo empezar tu negocio online.
Como sabes, tener tu negocio online es una necesidad hoy por hoy. Sencillamente no hay otra alternativa para la promoción y la venta de tus productos o servicios. Sin embargo, y como también sabrás, solo porque tengas una web o tienda online, blog o redes sociales no significa que vayas a conseguir un puesto en el olimpo del éxito online.
Necesitas un montón de planificación y técnicas vinculadas a la venta online. Y también tienes mucha información asociada a ella. Además, siempre puedes contratar una agencia de marketing online que te ayude con este tema. Entonces, ¿Por qué vas a complicarte las cosas?
Para asegurarte de que empiezas con buen pie en el mundo online, aquí tienes 10 errores comunes que se suelen cometer al empezar online. En el momento los conozcas y entiendas estos errores, podrás hacer la transición a online mucho más fácil.
Tabla de contenidos
1.- Esperar demasiado tiempo para salir online
Puede que estés esperando feedback, el momento perfecto para salir o conseguir un mínimo de visitantes a tu página, a tu blog o suscriptores a tu newsletter antes de lanzarte a la piscina. Hacer esto durante meses o años (sí, ha pasado) es uno de los peores errores que puedes cometer a la hora de saltar online.
Independientemente de cuál sea la razón – no tengo tiempo, me falta financiación o tengo miedo de que fracase – permanecer en este estado de limbo es perjudicial para tu negocio. Cuanto más esperes para sacar un producto a la venta más te alejas de tu plan de negocio inicial. Esto no solo significa ingresos no ganados, sino también un negocio que nadie va a apoyar una vez te decidas a lanzarlo. Hay que entender los tiempos.
Como empresario, vas a cometer errores y habrá piedras en el camino. En lugar de preocuparte por estos posibles fracasos y sobre-pensar en tu negocio, saca tu producto al aire y a partir de ahí empieza a hacer los retoques necesarios.
Una vez que des este paso, te acercarás más a un beneficio sostenible.
2.- Hacerlo solo
Solo porque sea tu negocio no tienes que aventurarte a hacerlo todo tú solo. De hecho, es prácticamente imposible que seas capaz de llegar un negocio online tú solo. Entre el tiempo, la multitud de habilidades requeridas y el estrés acumulado, debes hacerte con un equipo para poner en marcha tu negocio. Con suerte, si has recibido financiación o ya estás haciendo ventas tengas suficiente para contratar a las personas adecuadas para llevar tu negocio online, como un diseñador o un experto en social media. Y no tengas ningún reparo en subcontratar de manera externa, siempre y cuando sepas llevar la voz cantante y seas la fuerza motriz y el alma detrás del proyecto y la marca.
3.- No ser diferente
Lo más probable es que tengas competencia, a menos que estés en algún mercado único, que no suele ser lo normal. En lugar de subestimar a tu competencia, céntrate en las razones realistas de porqué los clientes potenciales deben elegirte a ti, en lugar de copiar a otros.
En resumen, no podrás conseguir una clientela si lo único que ofreces es una versión inferior de otro producto mejor conocido o mejor vendido igual que el tuyo. Quieres proporcionar un producto o un servicio de calidad, y también quieres que sea diferente y apartarte de la competencia.
4.- Resolver un problema sin importancia
Una de las principales causas por las que falla un negocio es sencillamente porque ofrecen un producto o un servicio por el que nadie se preocupa realmente. Aunque pueda sonar obvio, ¿Por qué la gente no se preocupa por este negocio?
Lo más probable es que no esté resolviendo ningún problema. ¿Por qué alguien compraría un producto? Porque lo necesitan para mejorar su vida en algún aspecto. Si un producto no logra eso, necesitas repensar tu negocio.
5.- No escuchar a los clientes
¿Cómo saber si el problema que quieres resolver es suficientemente importante para los clientes? Escuchándolos- Así de sencillo. Ya sea a través de una investigación de mercado o monitorizando las redes sociales, no escuchar a tus clientes es un error fatal. ¿De qué otra manera vasa saber en qué quieren invertir o lo que la gente aprecia o no de tu negocio, de tus productos o de tus campañas de marketing?
Estar online significa que tienes que escuchar y participar con tus clientes potenciales y con los visitantes de tu proyecto.
Escucha todo lo que dicen tus clientes. Tu reputación online puede dañarse en cuestión de segundos. Depende de ti escuchar y hacerlo bien. Si no escuchas a los que te tienen que comprar vas a pagar las diferencias. Las estadísticas dicen que por cada persona que se queja online hay 10 que mantienen la calma en la calle y en las redes. Si has oído una queja en digital no es la única.
6.- Dirigirte a un mercado demasiado pequeño
Entendemos el atractivo de acorralar un nicho pero, y si tu mercado objetivo es demasiado pequeño? El resultado es que tienes un techo bajo y que el crecimiento de tu empresa se parará antes de lo que piensas. Elegir un mercado un poco más grande te dará una oportunidad de conseguir una porción del pastel. Independientemente del tamaño de tu empresa.
7.- Expectativas poco realistas
Esta es de las buenas. Tienes que estar listo y dispuesto a meterle horas y trabajo a funcionar en online. Y, si estás pensando que vas a tener éxito de la noche a la mañana, necesitas una dosis de realidad. Eso no va a pasar.
Aparta estos aires de grandeza y habla con tus compañeros emprendedores sobre los comienzos de un negocio online. Por lo menos tendrás mejor comprensión de lo que está por venir. Lo bueno, y lo no tan bueno.
8.- No preocuparte por tu producto
No estamos diciendo que tenga que obsesionarte o ser la pasión de tu vida. Sin embargo, al menos deberías cuidarlo y que te guste en lo que estás trabajando. ¿Quieres ser un emprendedor gruñón y estresado? No, pues sigamos.
Cuando te preocupas por tu ámbito de trabajo tendrás más conocimiento, más resistencia y más creatividad para construir un proyecto online más competitivo.
9.- No tener Partners
A menos que estés en un mercado en el que ya exista una red establecida de trabajos asociados como representantes, fabricantes o revendedores – como en la comunicación, la moda o la comida – será difícil conseguir que tu producto entre en los canales de distribución existentes por defecto. Si estás en un mercado un poco más único o más complicado, crea una lista de posibles fuentes de referencia y llega a ellos. Pregúntales si estarían interesados en vender o promocionar tu producto. Esto también te dará una mejor idea de si tu producto puede tener éxito o no.
10- No tener el capital necesario
Antes de lanzar tu proyecto online considéralo y calcula tu presupuesto. Aunque puedas creer que solo necesitas lo justo para alquilar un bajo y convertirlo en oficina y almacén, pagar un dominio, un alojamiento web y un diseñador web que cree y mantenga tu sitio también va a costar dinero. Sin presupuesto ¿Cómo puedes ponerlo en marcha y llevar tu negocio?
En el otro extremo, también puede ser un problema ganar demasiado dinero demasiado pronto. ¿Cuál es ese problema? Cuando tienes una cantidad de dinero excesiva, estarás tentado a gastar en cosas frívolas. Además, el crecimiento acelerado de tu proyecto hará que sea más difícil controlar su proyección y puedes morir de éxito si no lo gestionas bien.
Cuando se trata de capital, asegúrate de que tienes lo suficiente para pagar los gastos de manera anticipada. Y si aun así te sobra, guárdalo en un cajón para los días difíciles.
Esperamos que te ayude conocer estos diez errores a la hora de lanzar tu negocio online, si eres emprendedor seguro que te has encontrado con situaciones parecidas. Coméntanos tu experiencia. Puede ser divertido.